En este portal lo tenemos clarísimo. Viajar forma parte de nuestras vidas y cuanto más, mucho mejor. El principal problema que se opone a pasarse la vida de un lado para otro suele ser el económico. Sin embargo, y aunque es imposible eliminar los gastos, sí que existen distintos trucos para reducirlos al máximo. Tomen buena nota.

Cómo gastar poco viajando

Antes de ponernos a detallar qué trucos podemos emplear para viajar mucho sin dejarnos el bolsillo en el intento es recomendable ir preparándose para ese viaje o viajes que estamos deseando emprender. Si conseguimos meter en una hucha 10 euros cada mes, a final de año dispondremos de 1.200 euros que nos pueden servir para realizar todo un viajazo.

Dicho esto, antes de cerrar ningún viaje debemos revisar todas las ofertas que se van vertiendo tanto en blogs especializados, grupos de Facebook o Instagram o incluso en las agencias offline de toda la vida. Cuanto más rebusquemos más barato viajaremos. De ahí que sea deseable preparar los viajes con tiempo.

Sea lo que sea lo que nos quede para gastar en cada viaje debemos diseñar un presupuesto en el que dejar claro cuánto tenemos para transporte, hoteles, comidas o regalos. Será así como sepamos si podemos estirar o acortar un viaje o agregar o reducir estancias en otras localidades.

A la hora de buscar viajar por ti mismo recurre a aplicaciones que ofrecen las mejores fechas y horarios para viajar lo más barato posible a un destino. Skyscanner, Momondo, Kayak o Trivago son algunas de las más conocidas, aunque no las únicas.

Huelga recordar que, una vez elegidos los destinos candidatos, podremos ahorrar ostensiblemente si nos informamos bien sobre cuál es el nivel de vida de cada destino. Lo que por otro lado nos ayudará a perfilar correctamente el presupuesto del viaje.

Como todo en la vida hay destinos de primera y de segunda. Los primeros son más caros y los segundos muchos baratos. Mucho más aún los que están fuera de los habituales circuitos de las tour operadoras. Si nos salimos de los catálogos de viaje podemos encontrar destinos baratísimos.

Muy especialmente si viajamos fuera de temporada. Ni falta hace recordar que si podemos viajar más allá de verano, Semana Santa o fin de año podremos aprovechar mucho más cada euro empleado en viajar. A menudo, claro está, no se puede elegir.

Si bien a veces no podemos evitar los aviones, sí que podemos evitar tomar trenes, autobuses o taxis haciendo autoestop o incluso hoteles u hostales recurriendo al woofing, couchsurfing o intercambio de viviendas. Hay vida más allá de la comodidad máxima. El aventurero siempre gasta mucho menos que el viajero.

Por ultimo, si queremos no dejarnos nada, conocer al máximo una cultura, comer en los mejores sitios sin gastar de más y vivir una experiencia completa no hay nada mejor que recurrir a los habitantes locales de un lugar para hacerlo. En términos económicos, gracias a ellos podremos ahorrar… y mucho.

Puntuación
[Total: 0 Promedio: 0 de 5]

Leave a reply